GENERAL MAC ARTHUR

DE LOS HÉROES.

“La juventud no es un periodo de vida, es un estado de espíritu, un efecto de la voluntad, una cualidad de la imaginación, una intensidad emotiva, una victoria del valor sobre la timidez, del gusto de la aventura sobre el amor al confort.

No se llega a viejo por haber vivido cierto número de años, se llega a viejo cuando se ha desertado del ideal.

Los años arrugan la piel; renunciar al ideal, arruga el alma.

Las preocupaciones, las dudas, los temores y las desesperanzas son enemigos que lentamente nos hacen inclinarnos hacia la tierra y convertirnos en polvo antes de la muerte.

Joven es el que se asombra y se maravilla, el que pregunta como un niño insaciable, ¿y qué más? El que desafía a los elementos y encuentra alegría en el juego de la vida.

Eres tan joven como tu fe, tan viejo como tu vida, tan joven como tu confianza en ti mismo, tan joven como tu esperanza, tan viejo como tu abatimiento.

Permanecerás joven mientras sepas entregarte a lo que es bello, bueno y grande, y a los mensajes de la naturaleza y de Dios.

Si un día tu corazón es mordido por ideas pesimistas, y roído por el cinismo, que Dios tenga piedad de tu alma de viejo”.

Un periodista preguntó en cierta ocasión al general Mac Arthur la edad que tenía. El general evadió la respuesta y convocó a los periodistas a una reunión para el día siguiente. Reunidos todos el general leyó el texto anterior, que recorrió el mundo entero.